Katherine Tai, representante comercial de Estados Unidos, confirmó este lunes la búsqueda de conversaciones comerciales “francas” con China.
El gigante asiático es el eje de una discusión que se centra en la creencia de que no ha cumplido con su parte del acuerdo de “fase uno”, firmado con la administración del ex presidente republicano Donald Trump.
“En los próximos días, tengo la intención de tener conversaciones francas con mi homólogo en China”, dijo Tai, quien igualmente anunció el inicio de un “proceso de exclusión de aranceles específicos” para la exención de diversos aranceles aduaneros.
I have said this before and I will continue to say it: the U.S.-China trade and economic relationship is one of profound consequence. Follow this thread for some live excerpts of my speech at @CSIS.
— Ambassador Katherine Tai (@AmbassadorTai) October 4, 2021
“No inflamar las tensiones comerciales”
La intención de Washington transmitida por Tai fue de “no inflamar las tensiones comerciales con China”, pese a la preocupación norteamericana concerniente a las “prácticas comerciales y no comerciales centradas a voluntad del Estado”.
“Mientras trabajamos para hacer cumplir los términos de la fase uno, plantearemos estas preocupaciones políticas más amplias a Beijing”, expresó Tai.
“Es poco probable que China haga reformas significativas en este momento”, comunicó un funcionario del Gobierno demócrata, quien también descartó a AFP alguna señal positiva para comenzar la “fase dos” de las negociaciones.
When it comes to our relationship with China, what’s best for American workers is growing the American economy to create more opportunity and more jobs with better wages here in the United States.
— Ambassador Katherine Tai (@AmbassadorTai) October 4, 2021
And we must harness and leverage the talent of our people by investing in education and worker training – investments that are included in the President’s Build Back Better plan.
— Ambassador Katherine Tai (@AmbassadorTai) October 4, 2021
¿De qué va la “fase uno”?
Liu He, viceprimer ministro chino, firmó el acuerdo comercial en el año 2020 con Trump, el cual estipulaba una mayor protección legal a las propiedades intelectuales por parte de China para evitar la falsificación de productos y actividades similares.
En él se plasmó el compromiso de China para añadir $200.000 millones en compras de exportaciones provenientes de Estados Unidos, incluyendo productos agrícolas y manufacturados, así como energía hasta el año 2021.
Diversos analistas y expertos comerciales coinciden en lo lejos que está el cumplimiento de los objetivos planteados.
ICYMI: CSIS hosted @AmbassadorTai for a conversation on the Biden-Harris Administration’s trade agenda.
— CSIS (@CSIS) October 4, 2021
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¿Y las tarifas “punitivas”?
Varias empresas estadounidenses criticaron la medida de aumentar los aranceles aduaneros a los productos que llegan desde China por valor de $370.000 millones.
La presión del sector empresarial más influyente sobre Biden se concretó en el mes de agosto, cuando se comunicaron los “costos crecientes” en la industria local a causa del pago del arancel “punitivo” por parte de los importadores.
ICYMI: CSIS hosted @AmbassadorTai for a conversation on the Biden-Harris Administration’s trade agenda.
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