Un informe preliminar de las autoridades haitianas expuso los planes contra el presidente de Haití, Jovenel Moïse, quien fue asesinado y que se supo iba a ser secuestrado en el aeropuerto de Puerto Príncipe 17 días antes, pero cambió su agenda a último minuto y no pasó.
Además de la participación de actores estadounidenses y colombianos, los datos expuestos y recopilados por el diario El Tiempo revelaron que, al momento del asalto a la residencia privada, “la puerta principal estaba abierta”.
El magnicidio, según la Policía, incluyó a los asesinos a sueldo colombianos Duberney Capador Giraldo y Mauricio Romero Medina, ambos con órdenes de matar y hurtar unos fajos de dólares en efectivo en el dormitorio de Moïse.
I give my condolences to the First Lady @martinejmoise and the President's family. Haiti stands with you in mourning today.
— Claude Joseph (@claudejoseph03) July 23, 2021
¿Cómo sucedió el magnicidio?
En el análisis policial de los testimonios se concluyó que, a pesar de haber recibido la orden del primero al mando Germán Alejandro Rivera García para matar a cualquiera hallado en el recinto, el comando se limitó a la “única condición” de acabar con Jovenel Moïse y nadie más.
Pero la coacción por parte de uno de los autores intelectuales y ex funcionario del Ministerio de Justicia, Joseph Félix Badio, pesó más que el supuesto motivo de los mercenarios de que fueron a la isla no precisamente a matar, sino a “cuidar personalidades”.
Dos maletines y dos cajas con la cantidad de $45 millones se hallaban en la habitación del mandatario asesinado, de los cuales $18 millones eran el preciado botín ofrecido a los asesinos para la consecución de un magnicidio bien financiado.
En este sentido, las empresas estadounidenses Worldwide Capital y CTU Security desembolsaron $865.376 ante la proyección exitosa de este procedimiento.
Rest in peace Président @moisejovenel pic.twitter.com/iiZzYCDjHG
— Claude Joseph (@claudejoseph03) July 9, 2021
We are shocked and saddened to hear of the horrific assassination of President Jovenel Moïse and the attack on First Lady Martine Moïse of Haiti. We condemn this heinous act — and stand ready to assist as we continue to work for a safe and secure Haiti.
— President Biden (@POTUS) July 7, 2021
Minuto a minuto
Organizados en cuatro grupos y repartidos en seis camionetas, las cuales trasladaban igualmente a al menos un par de policías haitianos, de acuerdo con la investigación, los mercenarios arribaron a la residencia el 7 de julio en la madrugada, alrededor de la 1:00 am hora local.
Por acción del comando mercenario Delta, compuesto por el ciudadano haitiano-estadounidense James Solages, entre otros, se supo que el grupo se dividió por piso e intentó agilizar la extracción de los billetes.
“Sacaron las cajas, tulas y maletas al corredor para que el grupo que estaba en el primer piso ayudara a bajar el dinero y acomodar en las camionetas”, dice el documento.
El texto narró: “sometieron al personal de los dos puestos de control de ingreso a la casa presidencial, en cada puesto había cuatro uniformados y los montaron en la parte trasera de las camionetas”.
En él no se detalló la hora del magnicidio, pero sí una reunión entre el exsenador opositor John Joel Joseph, el hombre de negocios Radolphe Jaar y Joseph Félix Badio en casa de la jueza del Tribunal de Casación, Wendelle Coq Thélot, todos prófugos de la ley.
Escape
Desde allí, tres días antes del asesinato, se les afirmó a los autores materiales que la jueza asumiría la Presidenta de Haití y que la seguridad presidencial estaría a cargo de ellos mismos.
Aun así, el escape de la compleja operación fue aparatosa para varios mercenarios como Duberney Capador, quien cayó muerto junto con otros, mientras que los demás fueron redirigidos por el coronel Rivera García a la embajada de Taiwán, donde luego colocaron bajo arresto a 11 de ellos.
Un hándicap en la investigación policial es el incendio de tres camionetas y con ellas varias pruebas clave, incluyendo los “millones de dólares” hurtados y un video de circuito cerrado desaparecido por uno de los comandos a cargo.